El Remix Cultural es la práctica de reinterpretar elementos del pasado o de distintas culturas y unirlos con estéticas, narrativas o tecnologías actuales.
Va más allá del recuerdo: crea algo nuevo con piezas conocidas.
Encontramos el remix o remezcla en el arte, con artistas re mezclando íconos clásicos con lenguaje visual moderno, por ejemplo, como GIFs, IA o glitch art. Otra manera es la creación de murales urbanos que reimaginan obras de Da Vinci con técnica grafiti y estilo pop.
La moda es otro buen ejemplo.
Combinar ropa tradicional o típica como el kimono, huipil, sari y hermanarlo con cortes contemporáneos y materiales sostenibles. Diseñadores como Jonathan Anderson o marcas latinoamericanas están creando piezas interculturales y provocativas.
La música es otro gran aportador para el remix. Ahora escuchas mezclas de géneros que antes no se juntaban: folclor con electrónica, bolero con hip-hop, cumbia con trap, y hay buenos ejemplos: Bomba Estéreo, Rosalía, Nathy Peluso y ahora también Latinoamérica Folk 3.0.
La Tecnología y los medios, más el uso de la IA son usados para recrear voces de cantantes históricos, redibujar pinturas o generar contenido interactivo basado en culturas antiguas. Pero también, los memes son parte del remix cultural para reinterpretar situaciones humorísticas con base en símbolos históricos.
El cine y las series son excelentes para reimaginar cuentos clásicos o figuras históricas desde perspectivas modernas o inclusivas, como ejemplo, Barbie.
¿Por qué está en auge o de moda la remezcla o Remix Cultural? Porque encaja con la Generación Z y los Millennials, que crecieron entre culturas digitales y reales y permite una crítica social elegante: usar símbolos de antaño para decir algo nuevo acerca de temas como la migración o la diversidad y porque es una respuesta al saturado mundo de lo “original”.
El Remix es una nueva forma de creación consciente.