Etiopía inauguró la Gran Presa del Renacimiento Etíope, considerada ahora la presa hidroeléctrica más grande del continente africano.
Al acto, celebrado en la zona de Guba sobre el Río Nilo Azul, asistieron los presidentes de Somalia, Djibouti y Kenia.
El proyecto, con una inversión aproximada de 5 000 millones de dólares, alcanza una capacidad de generación de 5 150 megavatios, para situarse entre las 20 mayores plantas hidroeléctricas del mundo
Varias turbinas ya estaban trabajando y produciendo 750 Mega Watts, y se espera que muy pronto funcione a capacidad total.
La apertura de la hidroeléctrica, representa un hito simbólico y práctico en la transformación energética de Etiopía, país con más de 120 millones de habitantes. La Gran Presa del Renacimiento, no solo genera electricidad para millones de hogares, también apoyará la agricultura, el control de inundaciones y exportará energía a la región.
Egipto, depende del Nilo para al menos el 90 % de su abastecimiento de agua, está preocupado por la reducción del caudal durante la sequía, y pide acuerdos legales vinculantes sobre el llenado y operación del embalse.
Sudán también se inquieta por el manejo del río y por el impacto en su infraestructura hidráulica.
Gran parte de Etiopía, aún tiene desafíos en infraestructura eléctrica, y la electrificación rural total, es un gran pendiente. Aunque la Gran Presa del Renacimiento Etíope, es el mejor impulso.
